Este lunes comienzan las actividades en la Universidad de Oriente-Anzoátegui, luego de haber sido suspendidas porque en 48 horas hubo cuatro heridos por hechos violentos.
Doryel Salazar Moya

La UDO lució despejada el pasado jueves y viernes Foto: Neptalí Flores / Archivo
Puerto La Cruz.- Tras dos semanas de clases perdidas, este lunes se reanudan las actividades en la Universidad de Oriente (UDO), Núcleo de Anzoátegui, en medio de un clima de incertidumbre.
La suspensión de actividades se dio el pasado miércoles, después que en 48 horas tres bachilleres y un profesor jubilado resultaron heridos, como consecuencia de la toma de las instalaciones del alma máter iniciada el pasado 15 de octubre por dirigentes estudiantiles de izquierda.
Este grupo ha argumentado que la protesta no es por cupos, como han declarado las autoridades udistas, sino para exigir mejoras en los servicios de transporte y comedor, así como un proceso de auditoría al sistema de ingreso de nuevos alumnos.
El clima de zozobra se mantiene, pues aunque se conoció que este lunes los accesos a la universidad no estarán restringidos, se ignora si se mantendrá la toma de las áreas administrativas.
Y es que tras la paralización de clases, el pasado jueves y viernes la universidad lució desolada.
Más vigilancia
La semana pasada, el Consejo de Núcleo (CN) aprobó solicitar a los cuerpos de seguridad un mayor refuerzo para la vigilancia de las áreas internas y externas, así como un plan de desarme, pues en los días del conflicto observaron a personas armadas.
La coordinadora académica del alma máter, María Teresa Lattuca, hizo énfasis en que están dispuestos al diálogo, pero advirtió que no entregará las actas en físico del sistema de admisión de alumnos, por tratarse de información confidencial.
Vale recordar que los manifestantes y las autoridades dialogaron el miércoles 17, pero los universitarios se retiraron de la mesa porque no estuvieron de acuerdo con la auditoría del proceso de asignación de cupos y fue por esta razón que mantuvieron la acción que ellos califican de pacífica a la espera de obtener los listado de los inscritos.
El dirigente de izquierda Luis Maíz informó que hoy tendrán una asamblea general para exponer a los udistas las razones del conflicto, y serán vigilantes de que en la UDO se cumpla con los servicios básicos de transporte y comedor, pues señaló que el Gobierno nacional sí ha enviado recursos para providencias estudiantiles.
No habló de tregua, pero sí dejó entrever que no dejarán a un lado la lucha.
Esta acción de los dirigentes de izquierda fue rechazada por otros movimientos estudiantiles que hacen vida en la UDO-Anzoátegui.
Para Eduardo Bittar, presidente de MasUnidos, a la protesta que hubo en el núcleo no se le puede llamar “reivindicativa”, pues la manifestación “transgredió el derecho de los demás, cuando agredieron física y psicológicamente a los estudiantes y les echan gases lacrimógenos para obligarlos a abandonar las aulas”.
Joan Infante, integrante del grupo ProUdistas, aseguró que la acción de los dirigentes de izquierda sólo demostró que no luchaban por los estudiantes sino en contra de las autoridades “por el hecho de que no siguen sus mismo ideales”.
También Tomás Aguilera, dirigente de Escudo Universitario, se mostró en contra de la violencia y de la anarquía que reinó en el núcleo durante dos semanas.
Aseguró que se violó el derecho al estudio y por lo tanto espera que cese el caos.
20 mil estudiantes
es la población con la que cuenta la Universidad de Oriente (UDO), Núcleo de Anzoátegui. En reiteradas ocasiones las autoridades han advertido que el presupuesto del alma máter lleva cinco años reconducido, sin tomar en cuenta la inflación. Y esta es la razón por la que no pueden ingresar a más bachilleres.